domingo, 29 de mayo de 2011

¿Has sentido alguna vez esa extraña sensación de no poder parar de reír y que al mismo tiempo tu cabeza te esté susurrando una y otra vez que no hay motivos para ello?... Pues bien, esa sensación es la que siento yo cuando te veo, cuando veo lo feliz que estas, cuando veo como tu vida a cambiado y yo no formo parte de esta nueva, es ahí cuando me hecho a reír, aunque en el fondo este muriendo, al pensar que al igual que tú puedes seguir sin mi, yo puedo seguir sin ti. Entonces llega ella, ella a la que tanto quieres ahora, pero la misma que nunca te querrá tanto como te he querido yo, y ¿sabes qué? me alegro de ello, así por lo menos algún día me echarás de menos. Si, puede que al verte con ella no pueda ni respirar, que me coman los celos pero ella nunca podrá compararse a mi. Y si tu has empezado tu nueva vida, ¿ por qué yo no puedo empezar una nueva? donde no estés ni tú ni esos maravillosos ojos de los que me enamoré, sí, lo tengo decidido, voy a empezar a vivir sin ti. Puede que no quiera a nadie tanto como te he querido pero lo voy a intentar, simplemente para ver la cara que pones cuando me veas haciendo con otro lo que hacía contigo. Puede que no te importe, que te de absolutamente igual, pero total, tampoco pierdo nada...

4 comentarios: